AÑO NUEVO EN LONDRES

Sí, estuvimos en Londres, Pedro Daniel y Elena nos acompañaron, allí nos unimos con mis cuñados María José y Mario y con nuestros sobrinos y respectivas esposas. Y amigos. Fue una reunión con sabor venezolano. Aprovechamos para ver un musical, en este caso Mamma Mia que disfrutamos de lo lindo. Visitamos nuevamente el Tate Modern que, como siempre, reune a expositores temporales de primera línea. Paseamos por avenidas y parques hasta cansarnos.

Londres es una ciudad trepidante y la tenemos muy cerca. Siempre que tengamos oportunidad la visitaremos de nuevo. Londres está apenas a dos horas de vuelo de Barcelona., el tiempo que se pasa en llegar en automóvil a la vecina frontera francesa. El hecho de tener familiares viviendo en esa metrópolis unido a que otros familiares cercanos se desplazaban a Londres desde Venezuela nos animó a pasar juntos el fin de año. Fueron unos días de gran intensidad ya que además de pasear por calles y parques, aprovechamos para visitar nuevamente el Tate Modern, el Barbican Center, la Serpertine Gallery y la National Portrait Gallery.
FLOWERS AND QUESTIONS
En la Tate Modern, visitamos FLOWERS AND QUESTIONS, de los conocidos artistas suizos Meter Fischli y David Weiss, cuya obra pudimos admirar en parte en la Expo de Sevilla, especialmente el corto The way things go que nos cautiva con el movimiento de los objetos que se van enlazando. Aquí pudimos ver además en forma conjunta como se hizo su filmación (Making things), o sea como se realizó la primera filmación. A mi me desilusionó. Es como se el mago te enseñara los trucos. No vale.
De todos modos, la muestra es una celebración de la lentitud. Ya era tarde, y pasamos por alto la novedad de los toboganes de Carsten Höller, que han sido criticados por convertir parte del Tate Modern en un parque de atracciones, pero que tiene el atractivo de llenar el edificio de padres de familia con sus niños.