Saturday, September 13, 2008

MORIR LENTAMENTE (PABLO NERUDA)

Hemos pasado casi dos meses en este rincón de los Pirineos que es el valle de La Cerdanya. La cumbre de la Molina ha aparecido hoy coronada de nieve. Días de paseo por los tranquilos pueblos de la Cerdanya francesa, un concierto en una ermita mediaval en Llivia, enclave español dentro de Francia. Algo de golf, gastronomía en un una masía perdida entre montañas...
Lecturas: "El Imperio de Kapuscinski. Relectura de "Oh, Jerusalén" de Lapierre y Collins.Una novela de Javier Reverte sobre Sarajevo, la prensa diaria y la lenta conexión a Internet. Hay tiempo para todo incluso para un lento paseo entre los arroyuelos y el río que está a la vuelta de la esquina. Y para copiar de la red algunas reflexiones. En este caso, una atribuída a Pablo Neruda:
"Muere lentamente quien se transforma en esclavo del hábito, repitiendo todos los días los mismos trayectos.
Quien no cambia de marca, no arriesga vestir un color nuevo y no le habla a quien no conoce.
Muere lentamente quien hace de la televisión su gurú.
Muere lentamente quien evita una pasión, quien prefiere el negro sobre blanco y los puntos sobre las “íes” a un remolino de emociones, justamente las que rescatan el brillo de los ojos, sonrisas de los bostezos, corazones a los tropiezos y sentimientos.
Muere lentamente quien no voltea la mesa cuando está infeliz en el trabajo, quien no arriesga lo cierto por lo incierto para ir detrás de un sueño, quien no se permite por lo menos una vez en la vida, huir de los consejos sensatos.
Muere lentamente quién deja escapar un posible amor, con tal de no hacer el esfuerzo de hacer que éste crezca.
Muere lentamente quien no viaja, quien no lee, quien no oye música, quien no encuentra gracia en si mismo.
Muere lentamente quien destruye su amor propio, quien no se deja ayudar. Muere lentamente, quien pasa los días quejándose de su mala suerte o de la lluvia incesante.
Muere lentamente, quien abandonando un proyecto antes de empezarlo, el que no pregunta acerca de un asunto que desconoce o no responde cuando le indagan sobre algo que sabe.
Evitemos la muerte en suaves cuotas, recordando siempre que estar vivo exige un esfuerzo mucho mayor que el simple hecho de respirar. Solamente la ardiente paciencia hará que conquistemos una espléndida felicidad."

Wednesday, September 03, 2008

AQUELLOS TOMATES EN EL CAMPO DE RIVESALTES

ALAMBRADAS EN RIVESALTES
El artículo que sigue al pie fue publicado en La Vanguardia del 27 de Agosto 2008 por Oriol Pi de Cabanyes. El hecho que narra lo recuerdo a pesar de los años por las fotos y cartas que nos enviaba mi padre. En Internet se encuentra amplia información sobre esos tristes y azarosos días. En la web de Carles Querol encontrarán mas información y podrán ver la foto de los dos hermanos Baqués al lado de las tomateras.
AQUELLOS TOMATES
" Se plantaron las tomateras a mediados de mayo, con luna creciente, a dos días del plenilunio. Las matas fueron compradas un sábado, en el mercado como medieval de Vilafranca del Penedès. Y en julio maduraron los primeros frutos, enramados en sus cañas. ¿Cuánto tarda en madurar un tomate? Semanas. Las mismas semanas, largas semanas, que los hermanos Jaume y Sadurní Baqués, internados en el campo de concentración de Ribesaltes, estuvieron vigilando por turnos, de día y de noche, aquellas tres o cuatro tomateras que habían conseguido sacar adelante frente a su barracón de prisioneros. Así nos los presenta, velando sus pequeñas tomateras con cara de pocos amigos, una foto, tomada el día 2 de julio de 1941, que ha recogido el historiador Carles Querol, quien fue el primer alcalde democrático de Sant Sadurní d ´ Anoia, en el volumen de medida gran folio Vés-te ´ n amb el cos, queda ´ t amb el cor.¡Cuánta ansiedad, cuánta esperanza, cuánta desesperación, cuánta miseria hay en esta imagen! Tener un huerto propio, aquello de la caseta i l ´ hortet que proponía Macià, casa propia y autosuficiencia alimentaria, ha sido tal vez el sueño más recurrente de la especie humana en el tránsito entre la sociedad dispersa agraria y la industrial de masas. Aquellos tomates de antes tenían sabor de tomate. Pero las variedades que fueron autóctonas se van perdiendo a pasos de gigante. Así, escasean ya los tomates de la creu o los tomàquets buits,llamados también de Montserrat,que son deliciosos, la pata negra de los tomates. Aunque si no se consumen de inmediato tardan poco en pudrirse. Desde hace algunas décadas avanza la extinción de muchas variedades tradicionales. Ahora que todo son híbridos y transgénicos, los huertos domésticos pueden contribuir a salvar el patrimonio de simientes "de toda la vida", como las llama el medioambientalista (también de Sant Sadurní) Francesc Ventura, que anda enfrascado en la conservación de semillas de toda clase de frutos. Del mismo modo que tenemos el deber de conservar los depósitos de conocimiento contenido en los libros, dice, son necesarios también los bancos de simientes que puedan garantizar en un futuro la posibilidad de nuevas combinaciones. La biodiversidad es algo que no puede dejarse perder. Posted by Picasa
Oriol Pi de Cabanyes